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Sentimientos, reflexiones, historias y opiniones del viaje que es la vida.
octubre 22, 2004
Soledades
21.10.04 Jirafa solitaria
Mi abuelita decía que no hay peor cuña que la del mismo árbol. Y bueno está que me pase por andar contándoles mis cosas a otras personas. Para eso tengo este diario y punto. No vale la pena… Les conté a una tía y su esposo –en quienes he confiado- y a mi hermano la sensación de soledad que me invadió el domingo en ManifestArte, y me dijeron cada cosa… de consuelo no me sirvieron sus palabras… O quizá sí. No voy a ponerme triste por estar soltera y sin chicos a la vista a los 31 años. En esta sociedad tan cerrada y pueblerina se ve mal, pero, acaso no soy apátrida? Acaso no soy extraterrestre? ¿Porque me voy a sentir mal porque los usos y costumbres de un lugar que me es extraño no se adapta a mí o yo a ellos? ¿De qué me sirve casarme con cualquier hijo de vecino para ser una mujer frustrada, amargada y amargar de paso a mi familia? ¿Sólo por no estar sola? No exijo hombres perfectos, que no existen. Yo no soy perfecta. Pero sí a alguien (relativamente) seguro de sí, que tenga la capacidad de amar, de apreciar la belleza (en el arte y la naturaleza), la ciencia, que sea honesto, comprensivo y responsable. Y que le guste bailar. NO es nada del otro mundo lo que necesito, lo que busco. La soledad es dura, pero tiene sus ventajas. Y en ellas me estoy concentrando.
Y ni ellos mismos, ni mis amigos me creen que siga sola. Yo sé que no soy un dechado de virtudes, pero tengo mis atributos a todo nivel. Es lógico que el chico sueco aquel que tuve que alejar (porque empezó siendo amigo y terapeuta y luego pretendía que fuésemos amantes, siento él casado) se haya sentido atraído por mí, y un señor ya mayor que conozco, que gracias a Dios he logrado alejar también. Sé que si conociera más hombres, tendría más oportunidades, y sé que se fijarían en mí, porque tengo mis puntos favorables, como todo ser humano. Pero esa es la cuestión. Los que conozco son en su mayoría casados (y gracias a Dios, fieles). A estas edades resulta más difícil la búsqueda y el encuentro. Pero tengo fe. Me aferro a eso. Y si está en mi Destino, es la Voluntad de Dios y es para mi bien y el bien de la humanidad, ya aparecerá alguien para mí, alguien que anda buscando a alguien como yo. Compleja, extraña, original… ¡Una Jirafa viajera! Mi hermano me decía que soy muy exigente (un amigo me dijo lo mismo), y que no aproveché las oportunidades que tuve… a ver: en la facultad de Medicina, mis compañeros vivían diciendo esto: “aquí sólo las feas entran, mejor vamos a Farmacia o a Ingeniería”… y se iban… Un amigo me dijo una vez: “Es que las características de la mayoría de patojas (chicas) que entra a esta facultad, es muy peculiar (quiso decir: son nerdas y no muy agraciadas físicamente)”. Claro, lo decían Brad Pitt, Pierce Brosnan, Ricky Martin, etc… O sea, dejémonos de charadas: ni ellos estaban guapísimos (excepto uno que otro) ni nosotras feas (excepto, una que otra). Algunas parejas se formaron entre los de mi promoción, no muchas. Y la mayoría ya se han casado. Sobre todo los hombres.
Pues estando allí, un chico muy buena gente, muy dulce y sincero me dijo un día, mientras yo estudiaba para un examen “mirá, tú me caés bien y te quiero mucho”; yo estaba preocupada por el examen y le dije que él también me caía bien y lo quería mucho (de hecho, lo quiero, aunque no lo veo hace tiempo y peor ahora que se ha casado con una esposa celosa). Y de repente, así de la nada me dijo “Y si somos novios?”. Me dejó en shock: ni el lugar, ni el momento. Y además: muy buena gente y todo, pero NO me gustaba!! No me atraía, no había “click”, química o como se le llame. Él no volvió a insistir ni me dijo nada (de repente, si hubiese insistido, ya estaría casada). Y seguimos de amigos. Fin de la historia. Luego, un residente mayor que yo, que estaba conociendo –según yo- en plan de amigos, en la segunda vez que salimos me salió con que durmiéramos juntos (¡?!) ¡Hombre, qué pretendía?! Fin de la historia. En realidad sólo me han pedido ser novia dos veces, las otras dos han sido por insistencia mía (no porque ellos quisieran) e igual, no duró nada. Eso sí, seguimos de cuates. La segunda vez, fue mi ex, el difunto. Y ya. O sea que tampoco estoy sola porque yo, malvada, exigente y calculadora, he tenido filas de pretendientes tras de mí, a los que he alimentado falsas esperanzas para darme luego la vuelta. Amigos sí, cuates un montón. Y creo que no es buena mi estrategia de ser cuates o amigos primero: de allí no pasamos (aunque a mi me interese el chico) y luego, él me ve como su hermana y me olvido de nada más. Y otra cosa: al ver al chico tal cual es, es difícil que me enamore (con lo difícil que me resulta per se caer en ese estado “pseudo psicótico”, según un mi cuate psicólogo), puedo quererlo, incluso llegar a amarlo, pero enamorarme fuera de contexto, idealizando al tipo en cuestión… difícil, difícil. Y el enamoramiento se necesita para iniciar relaciones de pareja. Estoy consciente de ello. Imbecilidad transitoria y todo, pero es necesario ese proceso. Como he dicho antes, sólo me he enamorado dos veces, y aún enamorada, he estado consciente de los puntos positivos y negativos de cada chico. Quizá sería mejor empezar una relación sin amistad o sin ser “cuates” antes… Sin embargo, eso de empezar siendo novios, sin saber nada del otro, sólo por instinto… Bueno, si es por el olfato sí, es una buena guía… Ay, mejor ni me preocupo. Ya Dios dirá, si es que quiere decir algo. La vida sigue y no soy mujer ni valgo como persona sólo en pareja. Soy mujer sola y no tiene nada de malo estar sola. OK, como ente biológico no transmitir los propios genes es un fracaso, pero somos más que seres biológicos. Somos seres mentales, sociales y espirituales también. Y además, me queda la inseminación artificial… una ventaja con la que los hombre no cuentan. Pero, soy una romántica… y además, prefiero un padre para mis hijos (1 ó 2). Paciencia, a sonreír y Namaste. =)
22.10.04 Jirafa soñadora
Cuando lo vi por primera vez, me impresionó. Se me fueron los ojos y pensé: “¡Qué lindo sería estar allí!”. Pero era sólo un sueño. El amor tiene la habilidad de traer los sueños desde el país de lo irreal hasta la realidad más tangible. A veces, también las pesadillas. Pero los sueños siempre pesan más. Decía que cuando lo vi quedé fascinada. Recién lo habían inaugurado.
Cuando estuve frente a él, no podía creerlo. Era real: el revestimiento de titanio, sus columnas retorcidas. Su techo como picos de turrón en un pastel. Reluciente. Recortándose contra las montañas y la lluvia. Entramos los tres, por sus escalinatas, hacia abajo: mi sueño se hacía realidad. Allí estaba. Y no yo sola, sino de la mano de otro sueño. Con el sueño que siempre había soñado. Hay sueños que se quedan en el país de los sueños. Aunque a veces parezcan tocar a la realidad. Lo recorrí extasiada. Y allí estaban ellos, mis pintores. No recuerdo si había algo de Oteiza… No lo recorrimos todo, ya iban a cerrar...
Y hoy he visto cómo lo construyeron. El trabajo valiosísimo de miles de obreros, la alegría de Thomas Gehry al ver cómo su idea tomaba forma y ya no sólo en la computadora o en la maqueta. El Guggenheim. Extraño, imposible, quizá fuera de contexto. Levitando sobre la Ría. Tengo un examen. Tengo que terminar un trabajo. Y yo, viendo la historia del Guggenheim de Bilbao, con la música de Philip Glass y de Bethoveen de fondo. ¿Las casualidades existen? El alma se me llenó de emoción y de nostalgia.
Anoche estuve pensando que hay que escoger bien las canciones que se dedican por primera vez a la pareja. Yo escogí dedicar “Suerte”, de Shakira. Luego dediqué “Underneath your clothes”, pero ya era demasiado tarde: la suerte estaba echada. Y creo que, como está en inglés, no fue comprendida en su totalidad. Salió desde el fondo de mi alma, pero no llegó a ninguna parte… Así es la vida. Suele suceder.
Mañana es la boda civil de una amiga y me ha invitado. Iré casi por compromiso, porque la verdad, no me apetece. Ya suficiente con la religiosa y su fiesta. Ya me conozco las fiestas de bodas: casi nadie baila. Y quienes bailan es porque llegaron con pareja. Pero esta vez, bailaré. Bailaré sola o con mi sombra, pero lo haré. Lo necesito. Ya le he dicho a mi amiga si no hay problema con eso y me ha dicho que no. Estoy autorizada por la anfitriona.
¿Qué tienen en común Chayanne, Carlos Vives, Juanes y Alejandro Sanz? Muchas cosas: son hombres, cantantes, tres de ellos compositores. Dan la impresión de ser dulces y cariñosos, apasionados y veraces (no los conozco, no lo puedo afirmar). Son muy celosos de su vida privada. Y son leo. Bueno, excepto el Ale que es sagitario. Signos de fuego todos. Y me encantan. El último disco de Juanes está buenísimo. Esa canción: “No soy nada sin tu amor”, es la dependencia con patas, pero me encanta. Está mejor esa para ser dedicada. O “A Dios le pido”. O “The One” de Shakira. Quizás… algún día! Aquí están las letras de las canciones que dediqué algún día a un sueño… El condicional ¿para qué existe? El tiempo no se puede regresar ni adelantar. Namaste.
LA QUE DEDIQUÉ:
Suerte (Shakira y Tim Mitchell)
Suerte que en el Sur hayas nacido
y que burlemos las distancias
Suerte que es haberte conocido
y por ti amar tierras extrañas
Yo puedo escalar los Andes
sólo, por ir a contar tus lunares
Contigo celebro y sufro todas
mis alegrías y mis males
-Coro-
Lero loreloray… sabes que
Estoy a tus pies
Lero loreloray… la felicidad
Tiene tu nombre y tu piel
Contigo mi vida
quiero vivir la vida
y lo que me queda de vida
quiero vivir contigo
Suerte que es tener labios sinceros
para besarte con más ganas
Suerte que mis pechos sean pequeños
y no los confundas con montañas
Suerte que heredé las piernas firmes
para correr por si un día hace falta
Y estos dos ojos que me dicen
que he de llorar cuando te vayas.
(Comentario Jirafuno: ¿Cómo no escuché bien toda la letra antes de dedicarla? No reparé en esas líneas...)
-Coro-
Ya sabes mi vida estoy hasta el cuello por ti.
Si sientes algo así, quiero que te quedes
junto a mí.
LA QUE DEBÍ DEDICAR
Underneath your clothes
(Shakira y Lester Méndez)/ Traducida al español por Jirafita =)
Tú eres una canción
escrita por la mano de Dios
no me equivoco
aunque te suene un poco extraño
tú ocupas el lugar
a donde mis pensamientos van corriendo
y justo bajo tu ropa
es donde los encuentro.
-Coro-
Bajo tu ropa
existe una historia sin final
allí está el hombre que he escogido
y mi territorio
y todo lo que me merezco
por ser una buena chica, cariño
Por ti
olvidé las formas convincentes de mentir
por ti
huyo de las razones que hay para llorar
cuando los amigos se han ido
cuando se acaba la fiesta
nosotros estamos aquí y nos pertenecemos uno a otro
-Coro-
Yo te amo más que todo lo que existe en el planeta
moviéndose, hablando, caminando, respirando
Tú sabes que es verdad
Oh, amor, es gracioso
que todavía no lo creas…
Así como toda voz cuelga desde el silencio
y las lámparas del techo
Como las damas y sus buenas costumbres
estoy atada a este sentimiento.
Mi abuelita decía que no hay peor cuña que la del mismo árbol. Y bueno está que me pase por andar contándoles mis cosas a otras personas. Para eso tengo este diario y punto. No vale la pena… Les conté a una tía y su esposo –en quienes he confiado- y a mi hermano la sensación de soledad que me invadió el domingo en ManifestArte, y me dijeron cada cosa… de consuelo no me sirvieron sus palabras… O quizá sí. No voy a ponerme triste por estar soltera y sin chicos a la vista a los 31 años. En esta sociedad tan cerrada y pueblerina se ve mal, pero, acaso no soy apátrida? Acaso no soy extraterrestre? ¿Porque me voy a sentir mal porque los usos y costumbres de un lugar que me es extraño no se adapta a mí o yo a ellos? ¿De qué me sirve casarme con cualquier hijo de vecino para ser una mujer frustrada, amargada y amargar de paso a mi familia? ¿Sólo por no estar sola? No exijo hombres perfectos, que no existen. Yo no soy perfecta. Pero sí a alguien (relativamente) seguro de sí, que tenga la capacidad de amar, de apreciar la belleza (en el arte y la naturaleza), la ciencia, que sea honesto, comprensivo y responsable. Y que le guste bailar. NO es nada del otro mundo lo que necesito, lo que busco. La soledad es dura, pero tiene sus ventajas. Y en ellas me estoy concentrando.
Y ni ellos mismos, ni mis amigos me creen que siga sola. Yo sé que no soy un dechado de virtudes, pero tengo mis atributos a todo nivel. Es lógico que el chico sueco aquel que tuve que alejar (porque empezó siendo amigo y terapeuta y luego pretendía que fuésemos amantes, siento él casado) se haya sentido atraído por mí, y un señor ya mayor que conozco, que gracias a Dios he logrado alejar también. Sé que si conociera más hombres, tendría más oportunidades, y sé que se fijarían en mí, porque tengo mis puntos favorables, como todo ser humano. Pero esa es la cuestión. Los que conozco son en su mayoría casados (y gracias a Dios, fieles). A estas edades resulta más difícil la búsqueda y el encuentro. Pero tengo fe. Me aferro a eso. Y si está en mi Destino, es la Voluntad de Dios y es para mi bien y el bien de la humanidad, ya aparecerá alguien para mí, alguien que anda buscando a alguien como yo. Compleja, extraña, original… ¡Una Jirafa viajera! Mi hermano me decía que soy muy exigente (un amigo me dijo lo mismo), y que no aproveché las oportunidades que tuve… a ver: en la facultad de Medicina, mis compañeros vivían diciendo esto: “aquí sólo las feas entran, mejor vamos a Farmacia o a Ingeniería”… y se iban… Un amigo me dijo una vez: “Es que las características de la mayoría de patojas (chicas) que entra a esta facultad, es muy peculiar (quiso decir: son nerdas y no muy agraciadas físicamente)”. Claro, lo decían Brad Pitt, Pierce Brosnan, Ricky Martin, etc… O sea, dejémonos de charadas: ni ellos estaban guapísimos (excepto uno que otro) ni nosotras feas (excepto, una que otra). Algunas parejas se formaron entre los de mi promoción, no muchas. Y la mayoría ya se han casado. Sobre todo los hombres.
Pues estando allí, un chico muy buena gente, muy dulce y sincero me dijo un día, mientras yo estudiaba para un examen “mirá, tú me caés bien y te quiero mucho”; yo estaba preocupada por el examen y le dije que él también me caía bien y lo quería mucho (de hecho, lo quiero, aunque no lo veo hace tiempo y peor ahora que se ha casado con una esposa celosa). Y de repente, así de la nada me dijo “Y si somos novios?”. Me dejó en shock: ni el lugar, ni el momento. Y además: muy buena gente y todo, pero NO me gustaba!! No me atraía, no había “click”, química o como se le llame. Él no volvió a insistir ni me dijo nada (de repente, si hubiese insistido, ya estaría casada). Y seguimos de amigos. Fin de la historia. Luego, un residente mayor que yo, que estaba conociendo –según yo- en plan de amigos, en la segunda vez que salimos me salió con que durmiéramos juntos (¡?!) ¡Hombre, qué pretendía?! Fin de la historia. En realidad sólo me han pedido ser novia dos veces, las otras dos han sido por insistencia mía (no porque ellos quisieran) e igual, no duró nada. Eso sí, seguimos de cuates. La segunda vez, fue mi ex, el difunto. Y ya. O sea que tampoco estoy sola porque yo, malvada, exigente y calculadora, he tenido filas de pretendientes tras de mí, a los que he alimentado falsas esperanzas para darme luego la vuelta. Amigos sí, cuates un montón. Y creo que no es buena mi estrategia de ser cuates o amigos primero: de allí no pasamos (aunque a mi me interese el chico) y luego, él me ve como su hermana y me olvido de nada más. Y otra cosa: al ver al chico tal cual es, es difícil que me enamore (con lo difícil que me resulta per se caer en ese estado “pseudo psicótico”, según un mi cuate psicólogo), puedo quererlo, incluso llegar a amarlo, pero enamorarme fuera de contexto, idealizando al tipo en cuestión… difícil, difícil. Y el enamoramiento se necesita para iniciar relaciones de pareja. Estoy consciente de ello. Imbecilidad transitoria y todo, pero es necesario ese proceso. Como he dicho antes, sólo me he enamorado dos veces, y aún enamorada, he estado consciente de los puntos positivos y negativos de cada chico. Quizá sería mejor empezar una relación sin amistad o sin ser “cuates” antes… Sin embargo, eso de empezar siendo novios, sin saber nada del otro, sólo por instinto… Bueno, si es por el olfato sí, es una buena guía… Ay, mejor ni me preocupo. Ya Dios dirá, si es que quiere decir algo. La vida sigue y no soy mujer ni valgo como persona sólo en pareja. Soy mujer sola y no tiene nada de malo estar sola. OK, como ente biológico no transmitir los propios genes es un fracaso, pero somos más que seres biológicos. Somos seres mentales, sociales y espirituales también. Y además, me queda la inseminación artificial… una ventaja con la que los hombre no cuentan. Pero, soy una romántica… y además, prefiero un padre para mis hijos (1 ó 2). Paciencia, a sonreír y Namaste. =)
22.10.04 Jirafa soñadora
Cuando lo vi por primera vez, me impresionó. Se me fueron los ojos y pensé: “¡Qué lindo sería estar allí!”. Pero era sólo un sueño. El amor tiene la habilidad de traer los sueños desde el país de lo irreal hasta la realidad más tangible. A veces, también las pesadillas. Pero los sueños siempre pesan más. Decía que cuando lo vi quedé fascinada. Recién lo habían inaugurado.
Cuando estuve frente a él, no podía creerlo. Era real: el revestimiento de titanio, sus columnas retorcidas. Su techo como picos de turrón en un pastel. Reluciente. Recortándose contra las montañas y la lluvia. Entramos los tres, por sus escalinatas, hacia abajo: mi sueño se hacía realidad. Allí estaba. Y no yo sola, sino de la mano de otro sueño. Con el sueño que siempre había soñado. Hay sueños que se quedan en el país de los sueños. Aunque a veces parezcan tocar a la realidad. Lo recorrí extasiada. Y allí estaban ellos, mis pintores. No recuerdo si había algo de Oteiza… No lo recorrimos todo, ya iban a cerrar...
Y hoy he visto cómo lo construyeron. El trabajo valiosísimo de miles de obreros, la alegría de Thomas Gehry al ver cómo su idea tomaba forma y ya no sólo en la computadora o en la maqueta. El Guggenheim. Extraño, imposible, quizá fuera de contexto. Levitando sobre la Ría. Tengo un examen. Tengo que terminar un trabajo. Y yo, viendo la historia del Guggenheim de Bilbao, con la música de Philip Glass y de Bethoveen de fondo. ¿Las casualidades existen? El alma se me llenó de emoción y de nostalgia.
Anoche estuve pensando que hay que escoger bien las canciones que se dedican por primera vez a la pareja. Yo escogí dedicar “Suerte”, de Shakira. Luego dediqué “Underneath your clothes”, pero ya era demasiado tarde: la suerte estaba echada. Y creo que, como está en inglés, no fue comprendida en su totalidad. Salió desde el fondo de mi alma, pero no llegó a ninguna parte… Así es la vida. Suele suceder.
Mañana es la boda civil de una amiga y me ha invitado. Iré casi por compromiso, porque la verdad, no me apetece. Ya suficiente con la religiosa y su fiesta. Ya me conozco las fiestas de bodas: casi nadie baila. Y quienes bailan es porque llegaron con pareja. Pero esta vez, bailaré. Bailaré sola o con mi sombra, pero lo haré. Lo necesito. Ya le he dicho a mi amiga si no hay problema con eso y me ha dicho que no. Estoy autorizada por la anfitriona.
¿Qué tienen en común Chayanne, Carlos Vives, Juanes y Alejandro Sanz? Muchas cosas: son hombres, cantantes, tres de ellos compositores. Dan la impresión de ser dulces y cariñosos, apasionados y veraces (no los conozco, no lo puedo afirmar). Son muy celosos de su vida privada. Y son leo. Bueno, excepto el Ale que es sagitario. Signos de fuego todos. Y me encantan. El último disco de Juanes está buenísimo. Esa canción: “No soy nada sin tu amor”, es la dependencia con patas, pero me encanta. Está mejor esa para ser dedicada. O “A Dios le pido”. O “The One” de Shakira. Quizás… algún día! Aquí están las letras de las canciones que dediqué algún día a un sueño… El condicional ¿para qué existe? El tiempo no se puede regresar ni adelantar. Namaste.
LA QUE DEDIQUÉ:
Suerte (Shakira y Tim Mitchell)
Suerte que en el Sur hayas nacido
y que burlemos las distancias
Suerte que es haberte conocido
y por ti amar tierras extrañas
Yo puedo escalar los Andes
sólo, por ir a contar tus lunares
Contigo celebro y sufro todas
mis alegrías y mis males
-Coro-
Lero loreloray… sabes que
Estoy a tus pies
Lero loreloray… la felicidad
Tiene tu nombre y tu piel
Contigo mi vida
quiero vivir la vida
y lo que me queda de vida
quiero vivir contigo
Suerte que es tener labios sinceros
para besarte con más ganas
Suerte que mis pechos sean pequeños
y no los confundas con montañas
Suerte que heredé las piernas firmes
para correr por si un día hace falta
Y estos dos ojos que me dicen
que he de llorar cuando te vayas.
(Comentario Jirafuno: ¿Cómo no escuché bien toda la letra antes de dedicarla? No reparé en esas líneas...)
-Coro-
Ya sabes mi vida estoy hasta el cuello por ti.
Si sientes algo así, quiero que te quedes
junto a mí.
LA QUE DEBÍ DEDICAR
Underneath your clothes
(Shakira y Lester Méndez)/ Traducida al español por Jirafita =)
Tú eres una canción
escrita por la mano de Dios
no me equivoco
aunque te suene un poco extraño
tú ocupas el lugar
a donde mis pensamientos van corriendo
y justo bajo tu ropa
es donde los encuentro.
-Coro-
Bajo tu ropa
existe una historia sin final
allí está el hombre que he escogido
y mi territorio
y todo lo que me merezco
por ser una buena chica, cariño
Por ti
olvidé las formas convincentes de mentir
por ti
huyo de las razones que hay para llorar
cuando los amigos se han ido
cuando se acaba la fiesta
nosotros estamos aquí y nos pertenecemos uno a otro
-Coro-
Yo te amo más que todo lo que existe en el planeta
moviéndose, hablando, caminando, respirando
Tú sabes que es verdad
Oh, amor, es gracioso
que todavía no lo creas…
Así como toda voz cuelga desde el silencio
y las lámparas del techo
Como las damas y sus buenas costumbres
estoy atada a este sentimiento.
octubre 20, 2004
Luna de octubre
19.10.04 Jirafita quejita
Hay una luna creciente muy linda. El cielo está estrellado. Ha habido mucho calor, lluvias, frío por las noches (12º C). Y bueno, el clima ya no es el que era. Cuando niña, en octubre hacía frío, viento (para volar cometas) y había sol, pero no calor excesivo. No se puede ya confiar en los días fríos de octubre.
Ya llevo tres días de retraso. Y a no ser que sea por obra y gracia del Espíritu Santo o “de sombra” (como decía mi abuelita cuando las gallinas ponían huevos sin haber sido fecundadas por un gallo), pues es sólo un retraso. Lo malo es que llevo estos tres días con PMS. Es horrible. Si los hombres tuvieran ciclos con hormonas fluctuantes, creo que nos comprenderían más. Te altera el humor, la forma de ver el mundo, te hace sentir mal físicamente, te altera todo… He estado estos días que ni yo misma me aguanto: una mezcla de tristeza, susceptibilidad en grado extremo, irritabilidad, enojo e impaciencia. Ojalá se me pase pronto. ¿Qué objetivo tiene el PMS? ¿Darles el derecho a los hombres de que nos vean como seres histéricos y difíciles de comprender? ¿Es el castigo por haber comido la manzana en el Paraíso? ¿Para qué existe? No creo que sea sólo porque sí. Dios no juega a los dados, dijo Einstein. Y todo tiene un propósito, aunque lo desconozcamos. PMS: premenstrual syndrome. En forma severa afecta (según estadísticas de USA) al 2.5% de mujeres en edad reproductiva. En forma moderada o leve, el porcentaje es mucho más alto. Gracias a Dios pocas veces me afecta como ahora; creo que ha sido una serie de asuntos que se ha ido agregando: las hormonas, el estrés de las clases, el trabajo mal remunerado, la inseguridad en el país, una pesadilla horrible que tuve, un comentario que –creí- no me había afectado, pero sí y una actividad a la que fui...
Quería escribir varias cosas, pero ahora ya no recuerdo cuáles eran. Ah, sí, una era siguiendo con lo de las hormonas, un reportaje acerca de la belleza que vi en Discovery Health. En la web hay una dirección de Discovery para latinamérica e iberia: www.tudiscovery.com antes era www.discoveryenespanol.com La verdad, nunca he entrado. Pero allí están esos reportajes. Pues bien, el reportaje era de por qué nos interesa la belleza. Hablaban de asuntos ya sabidos: que lo bello es lo que es más simétrico y lo más simétrico es lo más saludable. O sea, es cuestión de genética y reproducción. Han hecho investigaciones de lo que le parece bello a hombres y mujeres, en diferentes países y se han dado cuenta de que es similar la preferencia. Lo que me pareció nuevo y yo no sabía –por eso he tocado el tema- es esto: Normalmente los hombres se fijan sólo en el físico (que sean bonitas, saludables, jóvenes) pero las mujeres buscan algo más que el físico (que sean inteligentes, sensibles, honestos, etc). He escuchado a muchos hombres decir que eso no es cierto. Sí lo es. Sin embargo, muchas mujeres terminan con hombres de apariencia muy viril (mandíbula muy marcada, músculos bien desarrollados, muy velludos en cejas, barba y pecho) que no son ni tiernos ni tan sensibles ni nada. Y eso es por las hormonas: como los hombres tienen todos los días las mismas cantidades de hormonas, pues se dejan llevar por lo puramente físico, por instinto de preservación: es más fácil que una mujer joven y bien proporcionada quede embarazada (que biológicamente, es el objetivo de una pareja, preservar la especie), que una que tiene desproporcionado su cuerpo, porque quizá tenga problemas de salud. Pues bien, como las mujeres tenemos ciclos hormonales que varían en períodos muy cortos, tenemos más desarrollada la corteza prefrontal y sabemos que es más fácil llevarse bien con alguien que sea, como nosotras, más sensible.
En un experimento pusieron a muchas mujeres (inglesas y japonesas) de diferentes edades, pero no menopáusicas, a ver fotos de rostros masculinos y las que estaban en el período de ovulación escogían a los hombres con rostros representativos de hombres con mucha testosterona. Estos rostros estaban diseñados según un programa que los modificaba dependiendo de la cantidad de testosterona que pudieran tener. Y otro dato: durante la ovulación, hay más tendencia de la mujer a cometer infidelidades y buscar hombres que se vean muy masculinos (o sea, que tengan mucha testosterona). Cuando la testosterona y la progesterona suben, las mujeres pensamos menos y nos dejamos llevar más por el instinto de conservación. Si nos remontamos a nuestros tiempos de cazadores-recolectores, los hombres más musculosos, más aguerridos, eran los que estaban mejor capacitados para cazar y sobrevivir guerras con otros grupos; y por lo tanto, para proveer comida a los hijos y protegerlos. Ahora eso se ha sustituido por el dinero. El hombre con más dinero será el más buscado porque es símbolo de seguridad para los descendientes. Hemos evolucionada en la manera en que nos transportamos, nos comunicamos, nos curamos, etc. Pero en lo más básico, somos igual que cualquier descendiente en segunda o tercera generación de un Cro-magnon. Otro dato interesante: le tomaron fotos a los hombres y mujeres (en Japón e Inglaterra) que participaron en el estudio y las modificaron con el mismo programa, para hacer en diferentes grados, a los hombres más femeninos y a las mujeres más másculinas. Esas fotos estaban mezcladas con fotos de otras personas y todos escogían como más atractivas las fotos de ellos mismos: los hombres a sus propias fotos modificadas para parecer mujeres y las mujeres sus fotos modificadas para parecer hombres. Nada, que la genética influye muchísimo en nosotros. ¿Más que el ambiente y la forma de ver la vida? No lo sé. Quizá 50/50.
Ahora, respecto a las otras causas de mi mal humor, pues el comentario fue de un endocrinólogo que conozco. Fue mi residente cuando hice prácticas en el hospital. Estudió medicina interna y luego endocrinología en México. Le referí a una paciente con alteraciones de la hormona del crecimiento y la estimuladora de tiroides. Sospechaba un tumor. Y bueno, le hizo otros exámenes y le dijo que en efecto, es un tumor hipofisiario (y el sospecha acromegalia también). Ella le dijo que iría conmigo y él le dijo que no, que para qué si igual yo no sabía nada ni iba a entender lo que él estaba haciendo. La señora se indignó y llegó conmigo, para que la siga tratando. Igual va a ir con el endocrino’ pero seguirá yendo conmigo también. Yo estoy consciente de que no sé todo lo que él sabe. Pero creo que no es ético lo que dijo. Y tampoco soy tan tonta para no entender qué es la acromegalia. Y si lo ignoro con todos los detalles, puedo investigarlo y salir de la ignorancia. En el momento creí que no me había afectado. Pero como usualmente me pasa, en el momento me hago la estoica y luego me da qué pensar. No le voy a decir nada. ¿Para qué? No vale la pena. Me gusta la endocrinología, pero no me llama la atención estudiar cuatro años de medicina interna y luego tres o cuatro de endocrinología fuera del país. En España y en México se puede estudiar directamente endocrinología, sin medicina interna previa. Pero yo puedo hacer cuadernos, y aunque no sea como Neruda o como Cortázar escribo. Y él no. Escribe con faltas de ortografía. En lo que me hace pensar es en que no estoy en lo mío. En eso me hace pensar. Lo que me queda es seguir especializándome en el tema de la maestría. O hacer otra maestría. ¿Para demostrar qué a quién? A ver, si voy a estar sola, como satisfactor personal tengo el arte y la ciencia. Especializarme en alguna rama que me guste. Y hay muchas cosas que me gustan. Lo cual es una ventaja o una desventaja porque si una se dispersa, nunca hace nada en serio.
El domingo hubo un festival de arte que es anual. Se llama ManifestArte. Le dije a varias amigas y amigos, a mi familia, a mis compañeras de la maestría y nadie me hizo caso. Así que fui sola. A veces siento que me adoptaron, porque a nadie de mi familia (excepto a mi tío abuelo que murió hace poco) le importa el arte. Me dijeron que era una pérdida de tiempo, que tan lejos, que tan peligroso… Igual, me fui. El cerrito del Carmen es una montaña en la parte más antigua de la ciudad. Fue la primera iglesia que se fundó en este valle, a mediados de 1500. Allí fue el festival. Es una montañita llena de árboles, con una capilla dedicada a la Virgen del Carmen en la cima. Por cierto, el año pasado robaron la imagen de la Virgen. Vecinos del área estuvieron en oración para que apareciera (normalmente las venden fuera del país a coleccionistas de antigüedades) y apareció en medio de otra montaña, en otro departamento. Los ladrones se arrepintieron. ¿Porque las oraciones funcionaron? Como sea, ahora ya está restaurada en su retablo.
Nunca he entrado a esa iglesita. El domingo estaba cerrada. En el atrio se creó un escenario para obras de teatro y danza. En otras áreas había lectura de prosa y verso, pláticas literarias, exposición de pinturas y esculturas de alumnos de la Escuela Nacional de Arte (sólo una pintura me gustó, por cierto), jazz, rock, trova y música latinoamericana. Estuvo muy bonito. Y había un taller para aprender a hacer cuadernos artesanales. ¡Y aprendí a hacerlos! Allí tengo el mío. Lo he pintado de azul y le pegué flores secas que pinté de amarillo, lila y rosado. Lo decoré con puntos blancos. Estoy muy feliz con mi cuaderno. Miré una obra de Lope de Vega: “La dama boba”, interpretada por una compañía llamada Espacio blanco. Lamentablemente ya no pude ver ningún grupo de danza, pues llegué después del medio día. Tampoco pude ver las películas que presentaron; aún no soy omnipresente. Me fui sin comer, y no me importó. Fue una experiencia muy bonita estar sentada escuchando a los poetas leer sus creaciones, de fondo la música de Jazz de Fernando Pérez y yo cosiendo mi cuaderno. Los árboles meciéndose con el viento, la ciudad antigua con las montañas de fondo y el sol escondiéndose tras ellas. Parece un paisaje idílico. Y lo fue. Pero volteaba a ver a todos lados y lo que miraba era: parejas de novios, parejas de amantes, parejas de esposos, parejas de viejecitos, familias enteras con todo y perrito, grupos de adolescentes (sobre todo en el área de rock)… y yo sola. Como dije en alguna ocasión, la soledad me gusta, he llegado a hacerme muy amiga de ella. Pero a veces pesa. Como ese día. Me gustaría que hubiese alguien con quien compartir todos esos momentos (y que fuera conmigo porque sí le gusta, no sólo por complacerme). Eso me entristeció, lo admito.
Pero me alegra conocer a tanta gente pues encontré a una chica que conocí el año pasado en un taller al que fui, que era para superar la depresión. Fue en la facultad de psicología, vecina de la de medicina. El taller estuvo bonito y me ayudó bastante. Ella andaba con su pareja. Y como vive por mi área, pues al menos no tuve que regresarme sola de noche. Y gracias a Dios, llegué sana y salva a casa. Con hambre de comida material, pero no espiritual pues mi alma venía alimentada con la música, la energía y las creaciones de todos los artistas. Aquí no comprenden mi necesidad de escribir. Los artistas (sí, me considero una artista) somos incomprendidos. Namaste.
Hay una luna creciente muy linda. El cielo está estrellado. Ha habido mucho calor, lluvias, frío por las noches (12º C). Y bueno, el clima ya no es el que era. Cuando niña, en octubre hacía frío, viento (para volar cometas) y había sol, pero no calor excesivo. No se puede ya confiar en los días fríos de octubre.
Ya llevo tres días de retraso. Y a no ser que sea por obra y gracia del Espíritu Santo o “de sombra” (como decía mi abuelita cuando las gallinas ponían huevos sin haber sido fecundadas por un gallo), pues es sólo un retraso. Lo malo es que llevo estos tres días con PMS. Es horrible. Si los hombres tuvieran ciclos con hormonas fluctuantes, creo que nos comprenderían más. Te altera el humor, la forma de ver el mundo, te hace sentir mal físicamente, te altera todo… He estado estos días que ni yo misma me aguanto: una mezcla de tristeza, susceptibilidad en grado extremo, irritabilidad, enojo e impaciencia. Ojalá se me pase pronto. ¿Qué objetivo tiene el PMS? ¿Darles el derecho a los hombres de que nos vean como seres histéricos y difíciles de comprender? ¿Es el castigo por haber comido la manzana en el Paraíso? ¿Para qué existe? No creo que sea sólo porque sí. Dios no juega a los dados, dijo Einstein. Y todo tiene un propósito, aunque lo desconozcamos. PMS: premenstrual syndrome. En forma severa afecta (según estadísticas de USA) al 2.5% de mujeres en edad reproductiva. En forma moderada o leve, el porcentaje es mucho más alto. Gracias a Dios pocas veces me afecta como ahora; creo que ha sido una serie de asuntos que se ha ido agregando: las hormonas, el estrés de las clases, el trabajo mal remunerado, la inseguridad en el país, una pesadilla horrible que tuve, un comentario que –creí- no me había afectado, pero sí y una actividad a la que fui...
Quería escribir varias cosas, pero ahora ya no recuerdo cuáles eran. Ah, sí, una era siguiendo con lo de las hormonas, un reportaje acerca de la belleza que vi en Discovery Health. En la web hay una dirección de Discovery para latinamérica e iberia: www.tudiscovery.com antes era www.discoveryenespanol.com La verdad, nunca he entrado. Pero allí están esos reportajes. Pues bien, el reportaje era de por qué nos interesa la belleza. Hablaban de asuntos ya sabidos: que lo bello es lo que es más simétrico y lo más simétrico es lo más saludable. O sea, es cuestión de genética y reproducción. Han hecho investigaciones de lo que le parece bello a hombres y mujeres, en diferentes países y se han dado cuenta de que es similar la preferencia. Lo que me pareció nuevo y yo no sabía –por eso he tocado el tema- es esto: Normalmente los hombres se fijan sólo en el físico (que sean bonitas, saludables, jóvenes) pero las mujeres buscan algo más que el físico (que sean inteligentes, sensibles, honestos, etc). He escuchado a muchos hombres decir que eso no es cierto. Sí lo es. Sin embargo, muchas mujeres terminan con hombres de apariencia muy viril (mandíbula muy marcada, músculos bien desarrollados, muy velludos en cejas, barba y pecho) que no son ni tiernos ni tan sensibles ni nada. Y eso es por las hormonas: como los hombres tienen todos los días las mismas cantidades de hormonas, pues se dejan llevar por lo puramente físico, por instinto de preservación: es más fácil que una mujer joven y bien proporcionada quede embarazada (que biológicamente, es el objetivo de una pareja, preservar la especie), que una que tiene desproporcionado su cuerpo, porque quizá tenga problemas de salud. Pues bien, como las mujeres tenemos ciclos hormonales que varían en períodos muy cortos, tenemos más desarrollada la corteza prefrontal y sabemos que es más fácil llevarse bien con alguien que sea, como nosotras, más sensible.
En un experimento pusieron a muchas mujeres (inglesas y japonesas) de diferentes edades, pero no menopáusicas, a ver fotos de rostros masculinos y las que estaban en el período de ovulación escogían a los hombres con rostros representativos de hombres con mucha testosterona. Estos rostros estaban diseñados según un programa que los modificaba dependiendo de la cantidad de testosterona que pudieran tener. Y otro dato: durante la ovulación, hay más tendencia de la mujer a cometer infidelidades y buscar hombres que se vean muy masculinos (o sea, que tengan mucha testosterona). Cuando la testosterona y la progesterona suben, las mujeres pensamos menos y nos dejamos llevar más por el instinto de conservación. Si nos remontamos a nuestros tiempos de cazadores-recolectores, los hombres más musculosos, más aguerridos, eran los que estaban mejor capacitados para cazar y sobrevivir guerras con otros grupos; y por lo tanto, para proveer comida a los hijos y protegerlos. Ahora eso se ha sustituido por el dinero. El hombre con más dinero será el más buscado porque es símbolo de seguridad para los descendientes. Hemos evolucionada en la manera en que nos transportamos, nos comunicamos, nos curamos, etc. Pero en lo más básico, somos igual que cualquier descendiente en segunda o tercera generación de un Cro-magnon. Otro dato interesante: le tomaron fotos a los hombres y mujeres (en Japón e Inglaterra) que participaron en el estudio y las modificaron con el mismo programa, para hacer en diferentes grados, a los hombres más femeninos y a las mujeres más másculinas. Esas fotos estaban mezcladas con fotos de otras personas y todos escogían como más atractivas las fotos de ellos mismos: los hombres a sus propias fotos modificadas para parecer mujeres y las mujeres sus fotos modificadas para parecer hombres. Nada, que la genética influye muchísimo en nosotros. ¿Más que el ambiente y la forma de ver la vida? No lo sé. Quizá 50/50.
Ahora, respecto a las otras causas de mi mal humor, pues el comentario fue de un endocrinólogo que conozco. Fue mi residente cuando hice prácticas en el hospital. Estudió medicina interna y luego endocrinología en México. Le referí a una paciente con alteraciones de la hormona del crecimiento y la estimuladora de tiroides. Sospechaba un tumor. Y bueno, le hizo otros exámenes y le dijo que en efecto, es un tumor hipofisiario (y el sospecha acromegalia también). Ella le dijo que iría conmigo y él le dijo que no, que para qué si igual yo no sabía nada ni iba a entender lo que él estaba haciendo. La señora se indignó y llegó conmigo, para que la siga tratando. Igual va a ir con el endocrino’ pero seguirá yendo conmigo también. Yo estoy consciente de que no sé todo lo que él sabe. Pero creo que no es ético lo que dijo. Y tampoco soy tan tonta para no entender qué es la acromegalia. Y si lo ignoro con todos los detalles, puedo investigarlo y salir de la ignorancia. En el momento creí que no me había afectado. Pero como usualmente me pasa, en el momento me hago la estoica y luego me da qué pensar. No le voy a decir nada. ¿Para qué? No vale la pena. Me gusta la endocrinología, pero no me llama la atención estudiar cuatro años de medicina interna y luego tres o cuatro de endocrinología fuera del país. En España y en México se puede estudiar directamente endocrinología, sin medicina interna previa. Pero yo puedo hacer cuadernos, y aunque no sea como Neruda o como Cortázar escribo. Y él no. Escribe con faltas de ortografía. En lo que me hace pensar es en que no estoy en lo mío. En eso me hace pensar. Lo que me queda es seguir especializándome en el tema de la maestría. O hacer otra maestría. ¿Para demostrar qué a quién? A ver, si voy a estar sola, como satisfactor personal tengo el arte y la ciencia. Especializarme en alguna rama que me guste. Y hay muchas cosas que me gustan. Lo cual es una ventaja o una desventaja porque si una se dispersa, nunca hace nada en serio.
El domingo hubo un festival de arte que es anual. Se llama ManifestArte. Le dije a varias amigas y amigos, a mi familia, a mis compañeras de la maestría y nadie me hizo caso. Así que fui sola. A veces siento que me adoptaron, porque a nadie de mi familia (excepto a mi tío abuelo que murió hace poco) le importa el arte. Me dijeron que era una pérdida de tiempo, que tan lejos, que tan peligroso… Igual, me fui. El cerrito del Carmen es una montaña en la parte más antigua de la ciudad. Fue la primera iglesia que se fundó en este valle, a mediados de 1500. Allí fue el festival. Es una montañita llena de árboles, con una capilla dedicada a la Virgen del Carmen en la cima. Por cierto, el año pasado robaron la imagen de la Virgen. Vecinos del área estuvieron en oración para que apareciera (normalmente las venden fuera del país a coleccionistas de antigüedades) y apareció en medio de otra montaña, en otro departamento. Los ladrones se arrepintieron. ¿Porque las oraciones funcionaron? Como sea, ahora ya está restaurada en su retablo.
Nunca he entrado a esa iglesita. El domingo estaba cerrada. En el atrio se creó un escenario para obras de teatro y danza. En otras áreas había lectura de prosa y verso, pláticas literarias, exposición de pinturas y esculturas de alumnos de la Escuela Nacional de Arte (sólo una pintura me gustó, por cierto), jazz, rock, trova y música latinoamericana. Estuvo muy bonito. Y había un taller para aprender a hacer cuadernos artesanales. ¡Y aprendí a hacerlos! Allí tengo el mío. Lo he pintado de azul y le pegué flores secas que pinté de amarillo, lila y rosado. Lo decoré con puntos blancos. Estoy muy feliz con mi cuaderno. Miré una obra de Lope de Vega: “La dama boba”, interpretada por una compañía llamada Espacio blanco. Lamentablemente ya no pude ver ningún grupo de danza, pues llegué después del medio día. Tampoco pude ver las películas que presentaron; aún no soy omnipresente. Me fui sin comer, y no me importó. Fue una experiencia muy bonita estar sentada escuchando a los poetas leer sus creaciones, de fondo la música de Jazz de Fernando Pérez y yo cosiendo mi cuaderno. Los árboles meciéndose con el viento, la ciudad antigua con las montañas de fondo y el sol escondiéndose tras ellas. Parece un paisaje idílico. Y lo fue. Pero volteaba a ver a todos lados y lo que miraba era: parejas de novios, parejas de amantes, parejas de esposos, parejas de viejecitos, familias enteras con todo y perrito, grupos de adolescentes (sobre todo en el área de rock)… y yo sola. Como dije en alguna ocasión, la soledad me gusta, he llegado a hacerme muy amiga de ella. Pero a veces pesa. Como ese día. Me gustaría que hubiese alguien con quien compartir todos esos momentos (y que fuera conmigo porque sí le gusta, no sólo por complacerme). Eso me entristeció, lo admito.
Pero me alegra conocer a tanta gente pues encontré a una chica que conocí el año pasado en un taller al que fui, que era para superar la depresión. Fue en la facultad de psicología, vecina de la de medicina. El taller estuvo bonito y me ayudó bastante. Ella andaba con su pareja. Y como vive por mi área, pues al menos no tuve que regresarme sola de noche. Y gracias a Dios, llegué sana y salva a casa. Con hambre de comida material, pero no espiritual pues mi alma venía alimentada con la música, la energía y las creaciones de todos los artistas. Aquí no comprenden mi necesidad de escribir. Los artistas (sí, me considero una artista) somos incomprendidos. Namaste.
