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Sentimientos, reflexiones, historias y opiniones del viaje que es la vida.
mayo 13, 2005
Del CAFTA (o de cómo sobreponerse a los nubarrones tristes)
12.05.05 Jirafa inadaptadamente adaptada
Bueno, después de ver una entrevista a los presidentes de los cinco países centroamericanos y de República Dominicana en CNN, debida al CAFTA, me pregunto: hacia dónde vamos? Si pudiera manejar mejor la compu’, en este momento dibujaría una Jirafita con un palo al hombro y un atado colgando del mismo, como antiguamente se representaba a los que se van de casa, migrando… Después de oírlos, de verdad, da vergüenza ajena… y preocupación. Quizás el único que medio se salva es el de El Salvador. Al menos fue un poco más coherente en las respuestas. Les preguntaban X tema y respondían con A o C... ¡Y ellos nos representan! Por el amor de Dios! Dicen que cada pueblo tiene el gobierno que merece. Lo cual es sumamente preocupante… Yo no voté por Berger, que conste! Y qué puedo hacer al respecto? Pues no mucho. No sé si rezar sirva de algo. No lo sé… Cuando estudias las raíces de los problemas del país, te das cuenta de que eres una minoría sin poder y que cada quien hala para su lado, que estamos tan divididos que cualquiera puede venir a manejarnos. Y yo, yo sola, no puedo cambiar eso. Han muerto muchas personas tratando de cambiarlo. Y sí, ha habido algunos pocos cambios: por ejemplo, si antes te metías en política o criticabas al gobierno públicamente (aún con tus compañeros de la universidad, a los que creías tus cuates) aparecías muerto por allí. Ahora no es necesario meterte en política para que te maten: por robarte el dinero, el auto o el celular te pueden matar sin más preámbulos.
Es una triste ironía. Triste sobre todo porque es demasiado real: la violencia política se trocó en violencia social. ¿Y cómo cambiar eso si no hay voluntad política ni políticas sociales para ejecutar, ni visión ni misión de país? Por supuesto que los cambios son lentos, pero si al menos empezáramos a dar el primer paso… Pero no, los que detentan el poder (independientemente del político de turno en el gobierno) no están interesados en cambiar su status quo de señores feudales. Y así, no podemos avanzar y continuamos a la cabeza (sólo “aventajados” por Haití, el país más pobre de Latinoamérica) en primeros lugares en niveles de analfabetismo, analfabetismo funcional, desnutrición, talla baja, pobreza, pobreza extrema y después de Brasil en cuanto a niveles de desigualdad social, con brechas cada vez más grandes e inhumanas entre ricos y pobres. Alzar vuelo… ¿A dónde? ¿Qué país me adoptaría y valoraría mi fuerza de trabajo? No pregunto quién la necesita, porque mi país sería el primero, pero no la quiere: varias compañeras trabajando en el gobierno han salido de las dependencias gubernamentales quemadas y decepcionadas. Al final, siento que sólo la docencia con amor y ejemplo puede servir de algo… Aunque sea algo poquito! Y el amor, la educación, la formación de valores realizada en el seno familiar.
Titulé este blog como Jirafa adaptada no porque esté adaptada totalmente a esta sociedad (que no lo estoy ni lo estaré), sino a que me estoy aprendiendo a adaptar a cómo funcionan las cosas sin que me hagan daño y he aprendido a salir de los baches sin ayuda. Bueno, con ayuda de Dios. Estoy muy feliz de ello! Esta semana fue un reto, y salí airosa!!
Todo empezó el lunes cuando hablé con una amiga a quien le he tenido cariño –y a quien conozco desde el ’95, somos de la misma promoción de la U- que está mal. A ver, más que hablar con ella la escuché. Y me dio mucho dolor escucharla. Sobre todo por el hecho de no poder ayudarla. Me parece que padece de esquizofrenia o algo así, según me dijo la doctora que la atiende. Le cambiaron el medicamento y está muy mal. Y ella se da cuenta de que está mal, teme perder el control, la razón por completo. Y lloraba desconsolada diciéndome que no quería seguir así toda la vida, que ha hecho todo lo posible (está así desde el 2000) y no ve ningún resultado, que ya se cansó de trabajar sólo para comprar medicamentos y pagar terapias… ¿Qué se le puede decir? No es como un cáncer o cualquier otra enfermedad mortal, en la que claro, es duro enfrentar la muerte, pero siempre quedan esperanzas y además, tienes apoyo de amigos, familia… Incluso una enfermedad degenerativa (artritis, por ejemplo)… Pero las enfermedades mentales nos asustan, nos inspiran alejarnos de las personas que las padecen… y ella está joven, tiene 29 años… Yo no pierdo la esperanza de que se detenga el deterioro o se recupere, tengo fe. Pero sé que es difícil. El hecho es que me puso muy triste verla tan mal. No, yo no sirvo para psicóloga: terminaría llorando con cada paciente. Hay que reconocer las propias limitaciones!
Luego, el mismo lunes, me llamó un conocido que anda estudiando un doctorado en BCN, para contarme que había venido de vacaciones. Y no sé, escucharlo me puso triste. Me hizo recordar muchas cosas. Ahora que estoy bien, pienso en todo lo que pude haber hecho cuando estuve allá y no hice… Es dura la depre’… Aunque se aprende mucho de ella, lo sé bien. Y esa misma noche, mi hermano me dijo “Fijate vos que siempre he pensado que alguien escribiera una historia así y asá” –no diré cómo porque sigo con la idea de escribirla, aunque seré sólita yo- y me puse más triste aún porque precisamente esa historia la queríamos escribir con mi ex. De hecho, ya habíamos caracterizado a los personajes…
Luego, el martes fue el día de la madre. Hubo clase de baile en el gimnasio y aprendí pasos básicos de salsa, bachata y tex-mex. Espero seguir con las clases cada semana! =) Eso me alegró y además, había que mantener el tipo ese día: no quería aguarle el día a mi mamá. Se pone triste cuando me ve triste. La comprendí tan bien cuando vi mal a mi amiga el lunes: si a mí me dio dolor verla tan triste sin poder ayudarla, siendo sólo mi amiga, ¿Cómo se pudo haber sentido mi pobre madre al verme tan mal como estaba cuando regresé de BCN y después de que terminó la relación fallida? Definitivamente, tengo un sentimiento maternal muy grande y eso puede llegar a ser una debilidad si lo aplico con todo el mundo, no todas las personas se lo merecen porque hay gente que se aprovecha (no lo digo por esta amiga, que necesita todo el cariño, comprensión y paciencia que le pueda brindar), ya que damos por hecho que las madres todo lo soportan y los mismo siempre nos quieren… Y yo no puedo manejar ese tipo de relación-maternal/aguantadora con amigos o pareja porque termino siendo la alfombra de medio mundo… Cuando le conté a una amiga lo de la psiquiatra confundida, me dijo: “Es que vos sos demasiado buena gente y sólo ves a alguien medio mal y corrés en su ayuda, y la gente se aprovecha, vos; ten más cuidado con tus dosis de amor maternal… Cuidate de ella, mejor alejate!”. No lo había visto así –lo de ayudar a las personas que veo mal-, pero no deja de tener cierta lógica…
El miércoles, después de chatear con un amigo que vive en BCN quedé más triste aún… No sé bien por qué. Creo que es porque aunque él es buena persona, en el fondo es una antítesis mía y tiene más mala leche de la que estoy dispuesta a reconocer. Vamos, que es de la gente que todo lo ve color hormiga (o más negro), e inunda todo (hasta el Messenger) con su sensibilidad herida disfrazada de una mezcla de sarcasmo, amargura, brutalidad sin concesiones y tristeza. Y me quedé pensando todo el día en lo difícil que es que encuentre a alguien para mí, a alguien que ande buscando a alguien como yo… Más tristeza aún. Luego leo en una revista –mientras hago la cola del súper- que Sandra Bullock (quien me parece una mujer bonita, inteligente, graciosa, y no será una gran actriz, pero me gustan los papeles que ha interpretado, y no actúa tan mal tampoco) a sus cuarenta y un años –casi- y siendo además millonaria, extraña a alguien a quién amar porque no tiene pareja hace siglos ya que no ha encontrado a un hombre que a su criterio valga la pena. Por un lado me consoló pero por otro, si ella no encuentra pareja… Dios, necesito un milagro entonces!
Y hoy… Pues había quedado con mi conocido del doctorado –estará sólo un mes acá y se regresa a Barça- que me trajo algo que mi amigo de allá me envió (un libro que por cierto, estaba entre mi larga lista de libros por comprar) y para llegar a su casa tuve que pasar por la casa en donde asesinaron a mi padre. Fue como un viaje en el tiempo. De golpe se me vinieron muchos recuerdos –de cuando estaba mi padre vivo, y de cuando lo encontramos muerto, ensangrentado…-. Este mes cumpliría años mi padre. Ya era demasiado. Luego, en su casa veo ondeando una bandera de Cataluña que me recordó los paseos que realicé por pueblos de la provincia con mi ex. Y el golpe de gracia: pone un CD y escucho a Sabina cantar: “Sentados en corro, merendábamos besos y porros…”. Ya fue demasiado. Le pedí que por favor quitara el CD y mantuvimos una plática –yo lo escuchaba, él hablaba- de exaltación de su ego. Aparte de eso, dado su ateísmo, su costumbre de apropiarse de libros sin pagar, su ironía, su ausencia de compasión y de ternura hacia los demás seres, su afición al alcohol, al tabaco y su ánimo de venganza (la mezcla de todo ello me recordó a una pareja de amigos de mi ex), me llevó a concluir que habría podido ser buen amigo de mi ex… Un viejo y conocido refrán dice: “dime con quién andas y te diré quién eres”. Lo curioso es que siempre me cuestioné cómo mi ex podía tener amigos así: ¿es que él era un poco como ellos y no fui capaz de verlo? ¿Es que manejan el mismo sistema de valores y no he querido reconocerlo? Hmmm… Podría ser. Lo cual explicaría muchas cosas… Por ejemplo, el hecho de no poder caminar juntos dado que no manejamos el mismo sistema de valores…
Por otra parte, parece ser, según las personas que conocí en la lectura de poesías, que ese es el modus operandi de una buena parte de la humanidad, sobre todo entre personas con alguna instrucción, aires de intelectuales, de izquierda –sobre todo, pero los hay también de otras tendencias políticas: anarquistas, pijos rebeldes sin tendencia política definida y no sé quiénes más entren en la colada-, librepensadores y artistas. No encajo en ese grupo. Al parecer no encajo en ninguno. No soy conservadora-religiosa. Tengo ciertos rasgos conservadores en algunos aspectos, pero por ejemplo, no veo malo el sexo prematrimonial si se practica con alguien a quien uno ama. Pero no creo que sea correcto robarle al gobierno, al estado (que al final el estado somos todos), ver a las personas como objetos sin sentimientos, robar libros porque “igual los dueños de las librerías y de las editoriales son ricos”, ser sarcástica con el sufrimiento propio y ajeno, sentirme libre porque intoxico mi pobre cuerpo con cantidades navegables de alcohol, tabaco e incluso drogas como marihuana o costo (y le cargo luego los costos de salud derivados de mi irresponsabilidad para conmigo misma, a ese mismo estado al que no me canso de criticar por existir). Decir malas palabras en cada frase pronunciada (tienen su gracia, pero sabiéndolas usar en el momento preciso) o vivir resentida y amargada contra el sistema, la sociedad, la familia, el amor, el matrimonio, los valores de convivencia humana, la cortesía, los hombres (en mi caso; las mujeres en el caso de los hombres. Y verles como objeto de satisfacción sexual –tanto a hombres como a mujeres, según el caso y las preferencias sexuales) y un largo etcétera. Ah! Y ver de menos a los que no piensan como yo, burlarme de las creencias de otros –“pobrecita, crees en Dios”, me han dicho con aire paternalista más de una vez- y blasfemar contra lo que los otros consideren sagrado…
Bueno, pensando todo eso (más la sumatoria de todo lo acaecido desde el lunes), me sentí más bicho raro y más extraterrestre que de costumbre. Tenía ganas de llorar a mares. Así que luego de caminar un rato con este chico y una amiga con la que andaba (a quien trataba de forma grosera y desconsiderada, no sé como la chica soporta ese trato!) ellos se fueron por su lado y yo me encaminé a la Catedral Metropolitana. Siempre me da tranquilidad entrar a la Catedral. Me senté en una banca y lloré como niña perdida. Cuando logré tranquilizarme, me puse a rezar, luego a orar y finalmente me puse a leer a San Pablo. Y bueno, lo que sucede ahora no es nada nuevo. Siempre ha sido así. Por supuesto que hay muchas personas que creen en un Ser Universal y no practican lo que predican (difaman a la colectividad con sus acciones). Y no es que yo sea la cristiandad con patas, no señor! Sólo lo intento, pero no es fácil: me equivoco cada día… Un chico ateo que conocí me decía que era más fácil ser ateo que practicar –en serio practicar- cualquier religión con un corazón amoroso. Y tiene toda la razón. Fuera de dogmas y fanatismos, toda religión tiene sus cosas buenas y bien practicadas nos pueden ayudar a sacar lo mejor de nosotros mismos. Luego, me recordé de la pareja de un amigo, que es una analista social muy inteligente, sensible, cortés y tolerante. Iba a decir que es atea, pero no: cree en Algo. Cierto que el no creer en Dios (o en alguna forma de trascender más allá de este mundo) no debería hacer diferencia, porque nos queda el humanismo, la fe en la humanidad, los valores, el respeto, etc. Pero al menos, lo que he visto en la práctica es que la mayoría de ateos –por no decir todos- que conozco, suelen ser muy sarcásticos, hirientes y algunos hasta un poco amargadillos. Los únicos que no -pero sólo los conozco a través de sus libros- son Sábato y Benedetti. Y son poetas. Bueno, la mayoría de libros de Sábato suelen ser medio amargos y tristes…
A lo que iba es a esto: el mundo siempre ha sido así. En cualquier tiempo habría sido un bicho raro. No hay de qué preocuparse, por qué afligirse ni nada. Ellos son así, yo no. Punto. Tengo fe en que por allí andará otro bicho raro buscando a alguien como yo para compartir su vida. Total los extraterrestres tenemos formas de ponernos en contacto con nuestros semejantes! ; ) No, ya en serio: me alegra haber salido de todo esto solita, sin hacer tragedia ni nada. Es un pequeño paso para la Jirafa, pero un gran paso para la humanidad… ja, ja, ja! Total las lagrimas de hoy no son nada: en otro tiempo habría sido un diluvio. Por eso digo que ya voy adaptándome a ser desadaptada = ). Ah, y lo que sigo sintiendo es que tanto mi ex, como sus amigos, como este chico del doctorado, como mi amigo de BCN y como muchas personas más, son muy sensibles, pero para que no les hagan daño, para no ser vulnerables, para evitar el dolor, se colocan todas esas murallas alrededor… Si viviéramos con menos miedo, la convivencia sería más fácil. Y el amor no sería sólo una palabra tipo adjetivo o sustantivo, sino un verbo vivido día a día. Yo les deseo lo mejor y les tengo cariño, así como son. Por cierto, he pensado mucho en Eva, la novia de otro amigo de mi ex, que es muy maja y seguro, de haber seguido allá, nos habríamos hecho buenas amigas: ella estaría encantada acá con la ropa tan barata; de haber venido, seguro se habría ido con la maleta sobrecargada… Lo habría disfrutado mucho! Ya la imagino comprando ropa, encantada de los precios… Qué será de ellos? Seguirán juntos? Habrán comprado el piso que buscaban? Ojala estén bien. Se los deseo de todo corazón.
Y bueno, pidiendo por el bien de estos y de otros amigos, cuates, conocidos, ex y demás; con fe en Dios, en la Vida y en la humanidad, y solicitando un corazón compasivo –pero no de alfombra-, me voy a dormir. Ya es tarde. Namasté.
PD: el sentirme más atractiva y arreglarme un poco más ha extendido mi "Jirafa's fans club" al territorio de mis compañeros de trabajo casados... Fue chistoso el lunes cuando hicieron fila para darme un beso en la mano. Mi ego, por supuesto, saltaba de alegría. Mi alma sólo miraba... al fin se va sintiendo reflejada en mi apariencia! = )
