<$BlogRSDURL$>

Sentimientos, reflexiones, historias y opiniones del viaje que es la vida.

marzo 24, 2005

Semana Santa 

Je, je... el título de la vez anterior era "Errare humanum est"... Ooops! =)

23.03.05 Jirafa mestiza

Después de leer el libro “Grito” de Humberto Ak’Abal me he quedado preocupada. Mi mamá siempre me ha dicho que los indígenas son racistas y resentidos sociales. Y yo siempre se lo he rebatido. Pero después de leer ese libro… No sé. Los indígenas se aferran a lo maya para tratar de exaltar más su pasado. Pero la realidad es que los mayas no existían ya cuando vinieron los españoles. Había varios grupos indígenas con idiomas diferentes, aunque la mayoría (excepto los lacandones y ch’ortíes), con un origen común. Y en ese libro el poeta habla del dolor, la rabia, el resentimiento que llevan guardados desde hace 500 años. Es una mezcla explosiva, como una olla de presión. Y el coraje es contra los blancos, los españoles que inicialmente los oprimieron y luego, contra los mestizos, los aquí llamados ladinos. Contra nosotros.

Si los indígenas tuvieran el poder, no sé, quizá se vengarían de nosotros. Por supuesto, no todos los indígenas viven con esa consciencia. Muchos de los que han emigrado a las ciudades han ido olvidando la tradición oral, las creencias, las costumbres y hasta las ropas que sus abuelos acostumbraban llevar. Se tiñen el cabello, se visten diferente, y dejan de hablar la lengua de sus ancestros. Se avergüenzan, se cambian de apellidos. Pero pierden una parte de ellos mismos. Se “ladinizan”. Se pierden… ¿Qué es ser ladino? ¿Qué es ser mestizo?

Mi piel no es blanca. Tampoco es del color de la tierra, como la de tantos habitantes de este país. Es “morena clara”, dirían por acá. Y mis rasgos físicos tienen reminiscencias de mis tatarabuelos indígenas. Unos xincas y otros ch’ortíes. Reminiscencias de sus ancestros asiáticos. Pero no somos indígenas. Muchos mestizos, cuando les conviene, se las llevan de tener sangre indígena, pero cuando están en contacto con indígenas, se incomodan y no se quieren reconocer en esos rasgos (aunque sea evidente el parecido). O hablan de “nuestros indígenas” con un paternalismo que exaspera. Pero, ¿quiénes somos los “ladinos”? Taimados, desconfiados, negativos, resignados, “brinconcitos” (alegones, a la defensiva) a veces, callados y tradicionalistas. Así se nos ha descrito. Y aculturizados. Soñando con “mejorar la raza” con extranjeros del norte. Queriendo vivir el american way of life. Mirando al norte con ojos de sueño, de meta, de querer ser iguales. Una mezcla extraña y peculiar. Rechazando una parte de nosotros, que en su estado más o menos puro también nos rechaza a nosotros. Pretendiendo resaltar (y presumir) los orígenes europeos o gringos del apellido, de los ojos claros, de la piel blanca.

Ellos, del color de la tierra, con ojos rasgados, los dueños originarios de estas tierras. Los otros, los usurpadores, los explotadores, los divisores. Nosotros, la mezcla explosiva de ellos, de los otros y de otros más (negros, chinos) que no es aceptada por ninguno de los dos bandos, pero que también habitaron la tierra y desplazaron a los originarios dueños de la misma. Ellos quieren recuperar la tierra, que se hablen sus idiomas y se sigan sus costumbres. Nosotros hemos impuesto religiones, costumbres, y dictadores que han impulsado el modus operando guatemalteco: todo con rodeos, negativo, con miedo. “¿No quiere un cafecito?”, “Disculpe, no sabe qué hora es?”. Un periodista entrevistó a un psicólogo social que hablaba de esa peculiaridad guatemalteca originada en los regímenes de terror y el autoritarismo, en los que se prohíbe desobedecer al amo, al presidente, al jefe y se evade la responsabilidad personal. “No señora, no podemos venderle hojas sueltas, sólo por ciento; son órdenes de la empresa”. Y así sucesivamente. Lo vuelvo a repetir: desde la connotación negativa que el nombre “Guatemala” tiene, empezamos mal. Para cambiar la idiosincrasia, se necesitan cambios pequeños, de uno en uno. Y mucho tiempo y paciencia. Pero primero, hacer conciencia, de que sí, somos diferentes, algunos tienen a sus antepasados más remotos enterrados en el área maya, otros en algún lugar de Europa, pero estamos aquí, habitando el mismo espacio geográfico y tenemos que unirnos, respetando nuestras diferencias, para sacar adelante a este país. No es fácil. Pero necesitamos empezar a ver las cosas con el vaso medio lleno y dejar de preguntar o pedir con miedo lo que necesitamos. Dejar de sentirnos “chiquitos” o de menos porque no tenemos a un abuelo alemán, o porque no hablamos castellano sino mam. Dejar de avergonzarnos de ser como somos y empezar a existir, a vivir con orgullo de lo bueno que tenemos como personas. Dejar de compararnos. Y perdonar. Es difícil. Sobre todo porque aún hay heridas muy abiertas, que duelen y supuran. Y porque aún se siguen abriendo otras. Pero vale la pena intentarlo. Empezando conmigo misma. Y, si tengo el don o la dicha, creando consciencia en mi entorno. Al final, el cambio es personal. Namasté.

Guate. 25.03.05

Como aquí no hay estaciones tan marcadas, la Semana Santa es una forma de medir el paso del tiempo... Las jacarandas y los madrecacao florecen de lila y rosa. Hay bouganvilleas por todos lado. Los árboles del fuego se cubren de flores color naranja. El cielo celeste por el vapor de agua debido al calor se llena de cúmulos blancos y algodonosos. No me gusta el calor, se me baja la presión y me da sueño, me desagrada andar pegajosa por el sudor, pero no puedo negarlo: es una bonita época. Y la esperanza llena el aire de color esmeralda.



Necesito escribir. Pero no sólo aquí. También escribir de las historias que mujeres valientes, nobles y luchadoras me han compartido últimamente. Es bien fácil juzgar a los demás por su comportamiento sin conocer con certeza la razón de su forma de ser. Todo tiene una causa. Por eso, no hay que juzgar. Y hay que ser amable y comprensiva con todas las personas. Y ayudarles en lo que pueda. Sobre todo, si me solicitan ayuda. Estoy anonadada de tanto sufrimiento, de tanta fe, de tanta fortaleza y de tanta entrega. Por supuesto, el sufrimiento marca (no siempre para bien) y queda en nuestras manos el reto de ser mañana mejores de lo que somos hoy, porque siempre podemos mejorar un poco más. Y aprender a callar. Callar lo más que se pueda.

Una seria limitante en mi relación con los hombres fue la relación tan mala que tuve con mi padre. Es increíble cómo eso lo afecta a una. Aunque no se quiera reconocer. Hay muchos hombres que tienn mamitis. Y otros que no se llevan bien con sus propias madres (algunos las detestan, por no decir que las odian), y por extensión, con las mujeres: quieren estar con ellas pero se vengan con ellas de lo que su madre les ha hecho antes (con o sin intención; y sólo una persona muy dañada puede querer dañar a sus propios hijos a propósito y consciente de ello). Entonces, las hacen sufrir de una u otra forma. Y como lamentablemente muchas veces la relación madre-hijo es bastante despótica, hay mucho resentimiento acumulado en los hijos. ¡Ay! ¡Qué difícil es ser madre o padre! ¡Con qué facilidad se puede una pasear en la vida de los hijos! Se requiere mucho autoconocimiento, amor propio, heridas sanadas, autoestima saludable, sabiduría y preparación para llevar la maternidad/paternidad, lo mejor posible, sabidos de que somos humanos e igual la regamos –muchas veces, sin querer- y cometemos errores en la formación/educación/convivencia con los hijos. Hay que orar mucho para que Dios nos conceda sabiduría…

Por supuesto, que cuando una es adulta, tiene que asumir la responsabilidad por la propia vida y dejar de echarle culpas a los padres, tratar de automejorarse y aprender nuevas acitudes, comportamientos y formas de pensar que logren subsanar las deficiencias que se han ido arrastrando por años. Esto conlleva un proceso de autoconocimiento, fortalecimiento del amor propio, aceptación, autoestima saludable y voluntad política para llevar a cabo el proceso y los cambios necesarios, que no siempre son fáciles y muchas veces, duelen.

El primer paso para cambiar y superar problemas, es reconocer la existencia de los mismos. Ya lo dije antes: he tenido problemas en mis relaciones con los hombres. Tanto si son amigos, como si son jefes, compañeros de estudio o citas. Y ya he tocado suficiente el tema de mi ex pareja, en donde la situación llegó al límite. Es cierto que mi padre vivía burlándose de mí, era machista acérrimo y no me apoyaba. Es cierto que no era cariñoso y que no se portó bien con mi madre. Pero ya es tiempo de perdonarlo, de cerrar esa herida. Y dejar que sane. No todos los hombres son como él. Y ellos no tienen la culpa de que mi padre no fuera el padre cariñoso, proactivo y que creyera en mí, que yo quería (y necesitaba) que fuera. No puedo vengarme con los otros entes masculinos por el pasado. Ni vivir a la defensiva, en pugna y competencia con ellos. No tengo que demostrarle nada a nadie, excepto a mí misma. Ya dejémoslos en paz y dejemos de decir que si el cromosoma Y es defectuoso, y comentarios por el estilo. Ya basta. De lo contrario, sólo se me acercarán hombres que confirmen mis miedos y me permitan seguir a la defensiva. Y no quiero eso. Quiero un buen hombre, uno que valga la pena y pueda ser un buen esposo y padre amoroso. Para que mi hija no pase por lo que yo. Pero si pienso que “todos los hombres son tal o cual cosa” o “son hombres, no se les puede pedir demasiado”, pues así será lo que encuentre. Ya es tiempo de enterrar a mi padre y dejar de pelear con él (y con todos los hombres que encuentro) y darle una oportunidad a la sanidad, al amor, a la vida y la alegría. Pero no lo voy a hacer si sistemáticamente le cierro las puertas (en las narices) a todos los hombres que se me acercan, o si envío señales para que se me acerquen justamente los hombres que yo no quiero. La mente es poderosa. Lo he comprobado. Y el tiempo del cambio ha llegado… Por supuesto que hay que ser selectiva y tener cuidado. Eso es evidente. Tampoco se trata de dejar la puerta abierta para que entre cualquier baboso (que abundan). El término “baboso” no tiene la misma connotación en todos los países. Aquí implica tonto.

No todos son así. Y algunos cambian, mejoran, se “domestican”, diría mi amigo “El principito”. Anoche me reuní con dos amigos de la universidad, el Ale y el Omarcito. Amigos desde tercer año, con nuestros bemoles (por sus actitudes y las mías), pero allí estamos. Ambos se han casado y al fin sus esposas han comprendido que yo no soy como tantas mujeres roba-maridos, que ellos y yo somos sólo amigos y que no ha habido nada entre nosotros (un simple beso a lo sumo, con uno de ellos). Sus compañeras también llegaron y pasamos un rato muy agradable todos juntos, poniéndonos al día (más de 6 meses sin vernos!), riéndonos del pasado y tomando consciencia del paso del tiempo… que sí, asusta un poco! Es una lástima que no haya ningún sitio abierto más allá de las 12 AM, así que fue poco el tiempo compartido. Ellos son buenos chicos, y al parecer están muy unidos y contentos con sus parejas. Uno de ellos lleva ya casi 5 años casado y el otro, tres de vivir con su pareja. Este año se casan. Con este último fue curioso porque coincidió el momento en que él se hizo novio de su chica con el que yo empecé mi fallido noviazgo. Y los dos andábamos todos felices y emocionados en ese tiempo. Pues a lo que iba era a esto: desde que los conocí, pensé que cuando maduraran más, serían buenos chicos para pensarlos en plan de pareja. Y al parecer tuve buen ojo clínico. ¡Me alegro por sus parejas! Una muestra de que no todos son iguales! Aunque los dos, pero uno de ellos más que el otro, tiene una historia de corazones rotos que dejó tras sí. Por supuesto que las chicas del corazón roto sabían a lo que se metían cuando decidieron aventurarse en algo sin amor mutuo de por medio. Lo lamento porque sé que sufrieron mucho… Sin embargo, ellos han cambiado, gracias a Dios. Quizá hasta reconozcan su parte de culpa en el dolor ajeno y se hayan arrepentido de ello.

Quiero aprender a perdonar a la piche güey esa (léase con la connotación mexicana) de la psicóloga. Ayer escuché en el gimnasio la canción “Así es la vida”, del grupo “Elefante” y se me hizo un nudo el estómago, de pura cólera. Sé que después me arrepentiría, pero ¡Qué ganas tengo de romperle la cara a esa mosquita muerta! Ya sé, ni lo estoy haciendo ni lo haría, no me sentiría bien luego de dañar a un ser humano… Simplemente, aún siento ira. Organicé mis archivos de la compu’ y encontré una carta escrita para ella en octubre del 2003. No sé si se la envié o no, pero cabal allí dice todo lo que hizo mal –como decirme que estaba muuy mal!- y no fui capaz de ver como lo que era: tácticas de guerra. ¡Yo hasta creí que lo hacía por ayudarme, la bruja esa! En esa carta no lo miraba como lo que era, y me echaba la culpa de todo. Muy buena su estrategia, se le felicita: logró su objetivo. Cuando le dije que mejor vendría un tiempo a Guate antes de casarme, casi ya me quería fuera de España al día siguiente. ¡Y yo no me dí cuenta! Fui tan ingenua, tan inocente.! Lo que sucede es que cuando una no hace maldades de esa calaña, no cree que alguien más pueda hacerlas! Por supuesto que he aprendido la lección y ahora lo veo todo muy claro. Dicen que en la guerra y el amor todo se vale (Yo no estoy de acuerdo con esa afirmación). Pues bien, que les dure mucho su “amor”. “Amor” nacido de cadáveres y podredumbre. Amor nacido del engaño y del asesinato de mi inocencia, confianza e ingenuidad. De tratar de matar al verdadero amor. De hundirme y hacerme creer que estaba pésimamente mal y que era mejor alejarme de mi ex…

A los asesinos de mi padre, me costó perdonarlos, pero bueno: son (o eran, si viven, no lo sé) asesinos, sicarios, gente de mala calaña, enferma, de la que no se puede esperar mayor cosa, nada bueno... Así que los perdoné. Pero esto que hicieron una “psicóloga”!! Y un hombre en quien yo creí tanto, a quien consideré mi mejor amigo, a quien amé tanto!! Sí, es mezquino, vil, deleznable y anti- ético. Lo que quieran. Recurrí a ella en un momento en que me sentía vulnerable, me súper aseguró que a ella no le interesaba JP, que nunca habían tenido nada, que no se habían acostado juntos, que eran amigos muuuy lejanos y casi nunca se hablaban (ahora, lo dudo), que podía confiar en ella… ¿por qué hizo tantas aclaraciones? “A aclaración no pedida, acusación admitida”. Mi intuición me decía que no fuera con ella, que buscara a alguien neutral, que no lo conociera a él para nada. Bueno está que me haya pasado por no escuchar a esa sabia vocecita interna. El instinto no se equivoca. Ahora que me dijo que “después de una larga amistad surgió algo más”, todas las piezas cayeron en su lugar. Sólo fui un medio para lograr sus fines. Además, le habló de mí diciendo que yo estaba muy mal (y a saber qué más le dijo). Así que sí, es lógico que me sienta traicionada, dolida, iracunda y con ánimos vengativos. Pero ante esa situación, me guste o no, lo único que me queda es la resignación. Al igual que tuve que resignarme con el asesinato de mi padre. Nada más se puede hacer. Es duro, pero es lo que hay.

Así que a Dios le pido fuerzas y resignación para aceptar la situación; no, no es fácil. Pero nada puedo hacer más que resignarme, por mi paz mental y por la salud de mi corazón. Allá Dios con ellos. Siempre voy a pedir por sus almas. Ojala algún día reconozcan su error. Yo sé que cometí muchos errores. Era muy inmadura, no aceptaba la realidad, no era consciente de muchas cosas, no me conocía, no me aceptaba tal cual era, no era capaz de darme mi lugar y no había superado el duelo por mi padre; me sentía muy triste y muy sola. Además, la culpa dominaba mi vida y la manipulación de mi madre me afectaba mucho. Era muy ingenua y crédula. Demasiado confiada. Y mi postura existencial era de víctima, egoísta, ahogándome en un vaso de agua, viendo el vaso siempre medio vacío. Lo reconozco. No era fácil convivir conmigo en ese tiempo. Aún tengo rasgos egoístas, aún tengo mucho que cambiar, que superar, que aprender. Aún estoy en el camino del crecimiento personal. Pero no soy la que era. No. Para nada. Y por eso mismo, no puedo seguir envenenando mi corazón con recuerdos que me hacen daño, con ira y resentimiento que me lastiman y me hacen perder la paz. No vale la pena. Dejo todo en manos de Dios. Mi abuelita decía que no se mueve la hoja de un árbol sin la voluntad de Dios. Y aunque me ha costado aceptar esa idea, siento que es así. La vida es la vida. Y el sufrimiento es parte de la vida. Pero también la alegría, el amor, la realización y muchas otras cosas.

Por último, si lo vemos desde el punto de vista oriental, y aunque no sé mucho del karma, quizá todo esto es parte del karma que necesito liberar para continuar mi evolución, así que a pesar de todo lo que ha implicado, lo agradezco. Aunque hay formas menos dolorosas de liberar karma (meditar, por ejemplo) y ya va siendo tiempo de que me organice y la haga parte de mi vida. Tengo mucho por hacer, aprender, caminar y vivir. Y Amar. Namasté.

marzo 20, 2005

Errara humanum est 

08.03.04 Jirafa equivocada
He estado equivocada durante muchos años… Siempre creí que era posible la amistad -pura amistad, nada más que amistad, como la de dos amigos entrañables o dos amigas de toda la vida-, entre hombres y mujeres. Además, he creído firmemente que para poder iniciar una relación de pareja que sea estable, duradera y en la que pueda florecer el amor, primero hay que ser amigos, muy buenos amigos.
Sin embargo, resulta que las cosas no son así. Se pueden tener “amigos” (más bien dicho cuates), amigos de lejitos, con los que compartes algunas cosas pero no te explayas en tus alegrías y tristezas, tus angustias internas ni tus dudas existenciales. Menos aún reunirte con un amigo (si soy mujer) en su casa, solos, porque entonces si el amigo es de los que sí creen que puede haber amistad hombre-mujer, lo más seguro es que vas a terminar en la cama con él y luego, a hacerle ganas y seguir viéndolo como amigo nada más. Es mejor evitar la tentación… Las hormonas son las hormonas y los genes son los genes. No olvidemos esa verdad biológica.
He estado preguntando hace algunos meses a varios hombres si consideran que puede existir amistad-amistad entre hombre y mujer y sólo 4 me han dicho que sí. Y esos cuatro chicos tienen amigas con derecho, amigas con las que eventualmente si se dan las circunstancias, se acuestan. Luego, tengo tres amigos a quienes quiero mucho pero sé que somos muy amigos porque no están aquí en el país. Y uno de ellos es casado, además. Estamos lejos y por eso se ha conservado tan bien la amistad.
Entonces, resulta que según ese punto de vista, sí, hay que conocer lo más pronto posible a los pen Pals porque de lo contrario ¿para qué “perder el tiempo” escribiéndole a una persona que no nos interesa más que en el plano de posible pareja? Además, como me conozco y sé que yo no podría lidiar con el hecho de ser “amiga con derecho” de nadie, pues tengo que ir con cuidado en mis relaciones amistosas con chicos. Yo los miraba a todos como hermanitos. Bueno, no a todos!! (¡qué incestuosa! Ja, ja, ja!). Y no entendía por qué ellos no hacían lo mismo. Seré mojigata, o pasada de moda, o cuadrada, o muy conservadora, pero si yo termino en la cama con alguien, es porque siento algo más que amistad por ese alguien, y luego, si la otra persona no siente lo mismo, yo sufriría mucho. Así que ve con cuidado, Jirafita!!
¿O sea que sólo hay dos alternativas? O mirar de lejos a los hombres y llevar con ellos pseudo-amistades, de lejitos, o ser muy amiga y correr el riesgo de llegar a ser “amiga con derechos” sin derecho a reclamar nada…? Y que hay del crecimiento mutuo, del apoyo y la confianza, del amor fraternal? Creo que o soy muy idealista o estoy adelantada a mi época y se necesita otro tipo de humanidad para el tipo de amistad hombre-mujer e incluso mujer-mujer, hombre-hombre que yo he vivido en mi cabeza, que yo he pretendido cultivar y que no es real en este mundo, en estos momentos…
Ahora entiendo por qué he sufrido tanto respecto al tema “amistad”, durante toda la vida. Ahora entiendo por qué las mujeres celan a las amigas de sus parejas y los hombres celan a los amigos de sus parejas. Porque se cree que SIEMPRE hay atracción entre un amigo y una amiga (si no es que ha habido también uno o más “accidentes”, como los llamaba un amigo –ahora que se casó se alejó de sus amigas; además su esposa es muy celosa…-). ¿Quién me va a creer que yo no he sido así? Ahora lo comprendo todo. Es decepcionante caer de la nube a la cruel realidad… Yo estaba equivocada. Quizá en algunos siglos eso que yo miro como lo que debería ser, como lo normal, sea posible. Pero en estos momentos, no.
Y eso me lleva a otro problema: he dejado pasar oportunidades con algún chico que me atraía mucho (y era mutua la atracción; fue flechazo a primera vista, de hecho), encerrada en la idea de que como no éramos amigos-amigos, no podía haber nada allí porque el enamoramiento es una imbecilidad transitoria y si uno sólo anda con alguien por enamoramiento, no mira la realidad tal cual es, le pone encima a la otra persona las cualidades que le gustaría que tuviera y cuando descubre la realidad, todo se viene abajo. Por eso decía yo que era mejor empezar como amigos… ¿Y si ya dejé pasar mis oportunidades? No, yo creo y siento que Dios y la Vida siempre nos dan nuevas oportunidades. Esa es mi esperanza… Y que lo que es para una, nadie se lo quita. Pero no es la gracia!!: he dejado de vivir… Y ya basta de ello. La vida es demasiado corta como para dejarla ir así…
Uy! Tengo que cambiar radicalmente mi forma de pensar e imaginar en el tema: “hombres y ombres” y en el tema: “amistad hombre-mujer”. Quizás me adelanté algunos siglos al nacer. O simplemente soy una idealista nata. Como sea, como ser sensible e idealista, inteligente y analítico, estoy consciente de que vivir resulta un poco más complicado y doloroso para mí. Y yo soy la responsable de ello. Pero bueno, así me hizo Dios y hay que sacarle ventaja a esas características y no sólo verle el lado negativo. A mí me gusta ser como soy, a pesar de todo. Aunque estoy muy consciente de que tengo que cambiar muchas cosas y de que no será fácil. Sin embargo, hoy, Día de la mujer, es un buen día para empezar. Para re-nacer. Para darme permiso de re-inventarme. Namasté. =) ¡¡Y Feliz día a todas las mujeres, y a los hombres evolucionados del mundo!! (¡¡aunque el saludo llegue tarde!!)

This page is powered by Blogger. Isn't yours?

Licencia de Creative Commons
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.